Jesús Castellón
Equipo Género | Fe y Alegría Internacional
Fe y Alegría Internacional reafirma su compromiso con la promoción de la equidad de género a través de la implementación del “Manual de Masculinidades Igualitarias“. Este recurso, desarrollado con la colaboración de 26 educadores provenientes de 10 países, tiene como objetivo transformar las percepciones y conductas masculinas, fomentando la equidad de género y el bienestar social.
Este documento ofrece pautas específicas para la formación de identidades de género igualitarias desde las escuelas, combatiendo la poca valoración de los roles femeninos y fomentando nuevos modelos de masculinidad. A través de su implementación, los participantes han sido invitados a reevaluar la manera en que, desde su género, pueden contribuir a la construcción de una sociedad más igualitaria.
Alexis Castillo, acompañante de bienestar educativo integral de Fe y Alegría Ecuador, reflexiona sobre este proceso: “Yo vengo de un contexto en el que, desde mi crianza, me han repetido cosas como: ‘los hombres no lloran; las mujeres tienen estos roles definidos y los hombres también’. Cambiar ese constructo social que está tan arraigado en nosotros creo que ha sido el reto más grande en este proceso”.
Por su parte, Jesús Castrellón subraya la importancia de este proceso, “la transformación de nuestras prácticas y actitudes no solo beneficia a las mujeres, sino que también libera a los hombres de las presiones de la masculinidad tradicional. Es un proceso de aprendizaje que nos permite ser más empáticos y responsables en todos los aspectos de nuestra vida”.
El manual también destaca la necesidad de representar modelos de hombres igualitarios en las escuelas para inspirar a las nuevas generaciones a cuestionar los roles de género tradicionales. Esta representación no solo contribuye al bienestar integral de la comunidad, sino que también promueve la salud mental y emocional de los hombres.
Estudios realizados por organizaciones como Human Rights Watch en Bolivia, República Dominicana y Nicaragua, han evidenciado graves problemas de violencia de género y la persistencia de una percepción tradicional de la masculinidad. Teniendo en cuenta estos hallazgos, el manual busca contrarrestar estas tendencias promoviendo la participación activa de los hombres en tareas de cuidado y responsabilidades domésticas, favoreciendo una distribución equitativa del trabajo no remunerado.
El documento se estructura en tres niveles de cambio: el nivel cognitivo, que se refiere a las percepciones y conceptos que promueven la igualdad de derechos; el nivel afectivo, enfocado en fomentar una expresión emocional genuina y empática; y el nivel comportamental, que aboga por la adopción de prácticas igualitarias que desafíen la masculinidad hegemónica.
Promoviendo estos cambios, los hombres pueden convertirse en aliados clave para la equidad de género, fortaleciendo tanto la economía familiar como la comunitaria, y contribuyendo al desarrollo sostenible y equitativo. La capacidad de expresar y manejar emociones de manera saludable no solo mejora el bienestar emocional, sino que también crea entornos más empáticos y seguros para todos.
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