Para el director general de Fe y Alegría Venezuela, padre Manuel Aristorena, SJ, el mayor problema de la educación es la falta de docentes.

“Sí, a las escuelas les falta mantenimiento, pero eso con dinero se arregla. Formar un docente no se logra como se construye un aula; eso lleva su tiempo, sus años”, reflexionó Aristorena este sábado 06 de mayo en una entrevista para el programa ‘Alianza por la Educación’ que se estrenó a través de la Red Nacional de Radio Fe y Alegría. 

A su juicio, el mayor problema que afronta actualmente la educación en Venezuela es la falta de docentes, pues muchos de ellos han tenido que abandonar sus puestos de trabajo en búsqueda de alternativas que les permitan sostener a sus familias.

“Hay docentes que se han ido de Fe y Alegría llorando porque tienen verdadera vocación, pero no pueden vivir ni mantener a sus familias con los salarios actuales”, indicó.

Aristorena indicó que cerca del 60 % de los docentes que se han ido de Fe y Alegría se dedican ahora a otras actividades que les den mayor remuneración, mientras que el 40 % restante se ha ido del país.

Pero también le alarma ver las aulas vacías en las universidades, tales como la Universidad Pedagógica Experimental Libertador (UPEL), que precisamente se encarga de formar a nuevos docentes.

“Vamos camino a tener escuelas con alumnos, pero sin docentes”, manifestó.

De allí que para este 2023 Fe y Alegría propone una Alianza por la Educación al ver que este problema era ya de escala nacional “que no tiene solución con el trabajo de unos poquitos, sino que es un problema de todos y por tanto, deberíamos afrontar entre todos y aportar soluciones.”

Aclaró además que no se trata de salvar a Fe y Alegría y sus escuelas, “sino que queremos abrir el horizonte y darnos cuenta de que la educación en el país no está bien. Ese es el objetivo de esta alianza, salvar la educación del país”.

Propuestas desde diferentes sectores

Aristorena señaló que a través de la invasión educativa a los medios que hizo Fe y Alegría durante la última semana del mes de abril, los medios de comunicación «están tomando también conciencia sobre el problema y lo ponen en el tapete, que se vea. Se han comprometido a ir convenciendo a la gente de que requerimos una educación de calidad; no nos podemos conformar con cualquier cosa.»

Y a propósito de la Alianza por la Educación, destacó que han tenido reuniones con grupos de empresas «que se dan cuenta de lo mismo y hacen pequeñas ofertas, porque tampoco estamos en el mejor momento productivo, como becas, atender a las escuelas del entorno, apadrinarlas, pero todo eso queda por concretar.»

Además de eso, agregó que tienen planteada una reunión con personas del mundo universitario, de los gremios, así como personalidades que creen y piensan sobre la educación.

«Ahora hay que buscar respuestas concretas que se puedan plantear ante el Ministerio de Educación y, si hace falta, ante la Asamblea Nacional, porque ciertamente al final son políticas públicas lo que hay que construir que vayan a solucionar la gravedad del problema.», dijo.

Aseguró que tiene tiempo pidiendo una reunión directamente con la ministra de educación, Yelitze Santaella, pero no ha sido posible. Sin embargo, «sí hemos tenido encuentros con viceministros y viceministras y creo que todos somos conscientes del problema. Aquí no entra el partidismo político, es un problema de ciudadanía, de todos. En la Alianza tiene que entrar lo que siempre hablamos el tripartito: Estado, familia y sociedad. Este es un problema que tenemos que resolver entre todos.»

Para Manuel Aristorena, SJ, la educación debe ser parte, inclusive, de la discusión política, como el diálogo que deben sostener el gobierno y la oposición, así como las propuestas de quienes aspiren postularse a las elecciones presidenciales que tendrá Venezuela en 2024.

«Se van a encontrar con un país que, si no echamos mano todos a las educación, de dónde va a salir luego la mano de obra calificada para atender la administración pública o las empresas», cuestionó.

De parte de Fe y Alegría puso a la orden los 68 años de experiencia en barrios, caseríos y demás zonas alejadas llevando educación para todos sin ningún tipo de distinción. A esto se suma el trabajo que han logrado Fe y Alegría Universidad, que actualmente tiene currículo de atención a personal que trabaja en las escuelas pero no está graduado (en docencia) para que lo puedan hacer.

Mencionó también la experiencia de la enseñanza a distancia en tiempos de pandemia como lo hacen el Instituto Radiofónico Fe y Alegría (IRFA) con la educación semipresencial. 

El mensaje final del padre Manuel Aristorena, SJ, va dedicado a valorar la educación: «Hace muchos años, uno iba en Petare, a un ranchito, donde los papás les decían a los hijos que harían todo lo posible para que tuvieran una buena educación. A mi me gustaría que ahora los papás y las mamás valoraran igualmente la educación».