¿Qué motiva a la juventud venezolana a ser maestros? 

Marcos Adrián | Referente de Comunicación de Fe y Alegría Universidad

Imaginemos a un joven con el sueño de transformar vidas a través de la educación. Sin embargo, se enfrenta a una realidad donde los maestros son mal remunerados y cuentan con pocas oportunidades de desarrollo profesional. ¿Qué los motiva a desafiar estas adversidades para convertirse en maestros?

Entre las razones destaca ese sentimiento de tener “un don compartido con Jesús de Nazaret”, así lo siente Jhostin Fernández, estudiante del Instituto Universitario Jesús Obrero (IUJO). Para él, estudiar educación es una decisión personal que, al igual que Jesucristo, busca promover un modelo pedagógico basado en el amor y la opción por los más necesitados. Es una oportunidad para formar seres humanos integrales, capaces de reflexionar y aportar a la transformación social desde las aulas.

Jhostin reconoce que las sonrisas de niños, niñas y adolescentes lo motivan a seguir adelante, incluso en momentos desafiantes. Cada herramienta pedagógica y socioemocional que aprende en su formación le permite innovar y fomentar un aprendizaje significativo, dejando una huella de afecto y seguridad en sus estudiantes.

Al igual que Jhostin, Yohana Rodríguez comparte la vocación docente como algo innato en ella. Desde que recuerda, siempre ha sentido esa llamada a enseñar a otros. Yohana encuentra en su constancia y resiliencia las claves para superar las adversidades que enfrenta el sector educativo. “Ser maestra significa ser guía y acompañante, marcando la diferencia en la vida de los niños y niñas a través de la enseñanza y el apoyo cercano”, afirma.

Ambos estudiantes coinciden en que el poder transformador de la educación radica en la posibilidad de dejar una huella imborrable en el corazón de sus futuros estudiantes. Desde el IUJO, reafirman que la docencia es más que una carrera: es una misión de vida que contribuye a construir un país lleno de oportunidades.

En el marco de la celebración del Día del Maestro, cada 15 de enero, celebramos a quienes, como Jhostin y Yohana, eligen transformar vidas y comunidades a través de la educación. Su dedicación es un ejemplo de que, aun en tiempos difíciles, la vocación docente sigue siendo una fuerza imparable para el cambio social.

Caracas, 16 de enero de 2025