Javier Barrios | Equipo de Comunicación de Fe y Alegría Venezuela
El nacimiento de la primera radio educativa de Fe y Alegría en Venezuela, localizada en Maracaibo, marcó un hito importante en la historia de la educación radiofónica en el país. El 31 de agosto de 1975, la frecuencia 1390 AM, que había pertenecido a la Arquidiócesis de Maracaibo y se conocía como Radio Luna desde su inauguración en 1969, pasó a ser gestionada por el Instituto Radiofónico Fe y Alegría instancia dirigida por el Padre Javier Castiella, S.J.
Este cambio ocurrió en un contexto donde la radio era un medio innovador para la educación, permitiendo llegar a un público más amplio y diverso, particularmente a aquellos adultos que no habían tenido acceso a la formación formal.
Durante sus primeros años, Radio Luna se dedicó principalmente a la música clásica, lo que llevó a que la emisora adoptara el nombre de Radio Selecta. Sin embargo, el enfoque cambió con la llegada de Fe y Alegría, que desde sus inicios buscó implementar un sistema de educación no formal, caracterizado por su flexibilidad, al ofrecer cursos en diversos horarios y formatos. Este enfoque innovador fue reconocido por el Ministerio de Educación, que calificó al IRFA como un “instituto experimental”.
El Instituto Radiofónico Fe y Alegría se estableció en 1975 como una respuesta a la demanda planteada por el jesuita José María Vélaz, fundador del movimiento de educación popular Fe y Alegría. Durante una asamblea celebrada en Bolivia en 1973, Vélaz hizo un ferviente llamado para la creación de un espacio institucional dedicado a la educación de adultos a través del medio radio.
Tan solo un par de meses después, en octubre de 1975, la Arquidiócesis de Caracas cedió la misma frecuencia a IRFA, dando nacimiento a Radio Fe y Alegría Caracas, consolidando así la red de emisoras educativas en el país. Aunque no hay registros claros, se estima que los primeros cursos comenzaron a desarrollarse en 1976, centrándose en la creación de un sistema educativo adaptado a las necesidades de la población.
El IRFA, hoy llamada Fe y Alegría Educomunicación manejaba todos los planes y programas educativos, mientras que el Ministerio de Educación era responsable de la evaluación final de los estudiantes. Esta colaboración permitió que un gran número de personas accediera a oportunidades educativas que de otro modo habrían sido inalcanzables.
A medida que avanzaban los años, se comenzaban a implementar metodologías innovadoras, como el método ECCA y diversos cursos de formación laboral, incluyendo Corte y Costura y Electricidad. Además, la emisora se comprometió con la evangelización a través de programas compartidos por la comunidad.
Las emisoras educativas de Fe y Alegría no solo representaron una innovación en el ámbito educativo de Venezuela, sino que también ofrecieron un acceso sin precedentes a la educación a través de un medio que permitía conectar con personas que, por diversas razones, no podían acceder a la educación formal.
Caracas, 27 de noviembre de 2024
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